miércoles, 7 de abril de 2004

Masas

Vamos todos en grupo a la playa, que hace sol.
Vamos todos en grupo a la montaña, que da sombra.
Hablemos todos del tiempo que va a hacer, que nos afecta.
Organicemos nuestros días de asueto, que nos pilla el toro.

Animales de costumbres, animales gregarios, animales necesitados de compañía. Y animales masificados.

Pero nos olvidamos de disfrutar el minuto a minuto, el no hacer nada, las cosas pequeñas. Impresiona cómo en estos días no hacemos otra cosa más que tratar de darnos envidia unos a otros sobre nuestras deslumbrantes ideas para viajes, viajes afrodisíacos que nos harán seguir vivos hasta al menos dentro de tres meses (en que volveremos a estresarnos).

Me quedo. Me quedo con mis catarros. Con mi ciudad. Con mis amigos (los que se quedan). Con mis pequeñas cosas. Con mis miserias (muchas). Con mis luces (pocas).
Me quedo con mi música.
Me quedo con Ella.

O sea, que, bueno, que me quedo, o eso creo.
Hay días en que no estoy para nada.



Suena la corriente: "Sad Vacation" - Johnny Thunders