Pues supongo que será porque yo también espero que me pidan perdón. Y no, no me remonto hasta los visigodos, sino a aquellos neandertales que osaron hollar la arcadia hispana. Ya, no hay nada como seguir de cerca las lecciones magistrales de los profesores de prestigiosas universidades americanas. (...)
Pero digo que será porque majaderos de estos se ganan la vida maravillosa/miserable-mente, que yo me acurruco y dejo pasar el tiempo. Sin complicarme en demasía (pero seré embustero, si no hago otra cosa que dar vueltas a la cabeza todo el tiempo).
Que decía que será por todas estas chorradas, pero cómo disfruto de energéticas raciones de power-pop cuando me dejo llevar. Para qué me voy a complicar. Si disfruté del Congratulations I’m sorry hace algo más de 10 años, por qué no lo voy a hacer del nuevo disco de Gin Blossoms, Major lodge victory.
Siguen en lo mismo, guitarras pop-rock, melodías, energía supongo que juvenil, aun cuando ni ellos ni yo lo somos ya. Pero intuyo que recordar los college pop charts que arrasaron hace años nos hace sentirnos como si lo fuéramos.
Y además, qué más da. No entiendo la banalidad de lo intrascendente.
Si algo me da energía, me calma, me sonsaca una sonrisa, es más que válido. Y el power-pop tiene ese poder. Color y guitarras.
Y juguetitos como Let’s play two me arrebatan.
Hala, hala, a esperar que nos pidan perdón.
Suena la corriente: "Major lodge victory" - Gin Blossoms
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