Mala época para dejar de fumar. A pesar de la tos, de la carraspera recurrente, de la ausencia de ejercicio (un par de hernias por aquí, un quiste por allá), a pesar, y sobre todo, de la edad, mala época para dejar de fumar. Y encima este año el viejo bardo Tom Waits nos trae nuevo disco, el primero con nuevas composiciones desde Real Gone, hace siete años. Sí, mala época para dejar de fumar. (...)
Porque Tom Waits, en mi imaginario particular, siempre ha ido acompañando al humo. Y al whisky. Desde mis primeras escuchas a Closing Time o Blue Valentine, siempre nocturnas, porque la noche es el cuarto ángulo del cuadrado.
Y Bad as me es directo y ponzoñoso. Sucio. Continúa con su deconstrucción de estilos, su máquina de huesos desarrollada en los últimos años está presente, pero se deja mecer por la reinterpretación del rock’n’roll clásico, del r&b tabernario, del jazz nocturno de piano y burdel, de una manera más directa y accesible a como lo venía ejerciendo. Sí, son ya tópicos en la carrera de Waits, y en Bad as me no los deja atrás. Pero a pesar de que a veces se encienda la luz de ya oído, vuelves a caer como lo has hecho siempre. Como la noche y el humo cada fin de día. Y lo haces con gusto.
Compone como es habitual con su mujer, Kathleen Brennan, y se acompaña de viejos amigos, David Hidalgo, Augie Meyers, Charlie Musselwhite, Marc Ribot, y Keith Richards, (a él y a Jagger dirige Satisfied) con quien hace un decadente y maravilloso dueto en Last leaf.
Así que, viejo Tom, aquí seguimos. Con la salud jodida, y los oídos encantados. Es bueno fumar junto a usted, aunque sea cada siete años.
Buen día, tras esta noche en blanco.
Porque Tom Waits, en mi imaginario particular, siempre ha ido acompañando al humo. Y al whisky. Desde mis primeras escuchas a Closing Time o Blue Valentine, siempre nocturnas, porque la noche es el cuarto ángulo del cuadrado.
Y Bad as me es directo y ponzoñoso. Sucio. Continúa con su deconstrucción de estilos, su máquina de huesos desarrollada en los últimos años está presente, pero se deja mecer por la reinterpretación del rock’n’roll clásico, del r&b tabernario, del jazz nocturno de piano y burdel, de una manera más directa y accesible a como lo venía ejerciendo. Sí, son ya tópicos en la carrera de Waits, y en Bad as me no los deja atrás. Pero a pesar de que a veces se encienda la luz de ya oído, vuelves a caer como lo has hecho siempre. Como la noche y el humo cada fin de día. Y lo haces con gusto.
Compone como es habitual con su mujer, Kathleen Brennan, y se acompaña de viejos amigos, David Hidalgo, Augie Meyers, Charlie Musselwhite, Marc Ribot, y Keith Richards, (a él y a Jagger dirige Satisfied) con quien hace un decadente y maravilloso dueto en Last leaf.
Así que, viejo Tom, aquí seguimos. Con la salud jodida, y los oídos encantados. Es bueno fumar junto a usted, aunque sea cada siete años.
Buen día, tras esta noche en blanco.
Suena la corriente: "Last leaf" - Tom Waits
Empieza bien este 2012. Sin haber comenzado incluso. Pero es que encontrarse estas perlitas musicales nada más subirse a la barca, es un lujazo. Espero que nunca abandones el barco, Río Rojo,....
ResponderEliminarEso esperemos, que yo y vosotros sigamos en el barco, y disfrutando de estos "bardos"...
ResponderEliminarBeso