Maleso: "El músico tiene una jornada de trabajo de muchas horas pero solo cobra si toca en directo"

En la vorágine de los 80, los sevillanos Tiernos Mancebos llegaron a grabar un LP con Polygram y pudieron girar su pop de sabor británico con reminiscencias de aquella época. Como a tantos otros grupos, la marea les devoró, y se transformaron en Las Balas durante los 90, con resultados similares. Martín León es uno de esos músicos que no da su brazo a torcer, y conocedor del veneno de la música, asume que sin ella no es nada. Así que colabora con grupos como Soul Mama y Surpop, y en 2009 inicia una trayectoria paralela en solitario.

Su intención era, como cantautor pop-rock, llamarse por su propio nombre, Martín León. Pero el destino hizo que incluso ese nombre ya estuviera siendo usado por un cantante… ¡canadiense! Así que iniciales de su nombre y apellidos, Maleso, y a otra cosa. Se autoeditó dos discos, Regreso a Padre Marúriz (2009) y Moscas Volantes (2010), y ahora presenta su nuevo trabajo, Sabor campestre y del Oeste americano (2012). (...)



A primera vista parecería un cambio de registro, dejar atrás las influencias más pop con las miras en los grupos sixties británicos para mecerse por sonidos americanos, country, blues, folk. Pero son las melodías las que anclan todas las canciones entre ambos continentes. Al fin y al cabo, Gram Parsons hizo pop y los Stones blues, y la raíz de este veneno es la misma. Canciones como Cariño, he vuelto otra vez, Si me das un millón, Lloré por ti, con esas melodías que se te meten dentro conviven con estructuras más ortodoxamente americanas, como Fui al cruce de caminos, Esta vida me sienta mal o Elvis nos casó, y entre todas puede componer aspirantes a himnos locales, como Camino de Ubrique.

Charlamos con Martín para conocerle mejor, y, como ocurre en estos casos epistolares, hablamos del bien, el mal, la música y el músico.

Llevas desde los años 80, y no tiras la toalla. Los artistas que luchan contra viento y marea, y ahí siguen, son los que merecen un monumento. ¿Cómo ha evolucionado el negocio musical desde Tiernos Mancebos hasta ahora?
Eso, eso, un monumento. Cuando me lo pongan juro que no pondré tantas pegas como la Marta Domínguez. En la música ha habido muchos cambios, a finales de los 80, cuando salió el disco de Tiernos, comenzaban a editarse los primeros cds. Durante unos años, las casas de discos se forraron cobrando al cliente el doble por algo que a ellos les costaba una tercera parte que antes. Después ya hemos visto lo que ha venido, primero la posibilidad de fabricarte tus propios cds y luego internet y las descargas. Todavía parece que no se sabe muy bien donde va a quedar la cosa y los que antes ganaban mucho andan viendo a ver de dónde pillan ahora. Lo que no ha cambiado es que los músicos sólo ven dinero de las actuaciones en directo y que es muy difícil vivir de esto.

¿Y la evolución musical del propio Martín León?
Pues en estos años he oído mucha, mucha música. Empecé con monodieta de Beatles y de ahí pasé a los Rolling, a Jimi Hendrix, al blues, al soul, al jazz, a los musicales de Broadway, a Dylan, Jonathan Richman y al country en los últimos años. Mi música espero que se haya hecho mejor y le presto ahora mucha atención a las letras pero a mí, desde dentro, me cuesta trabajo decir en que he evolucionado o hacia donde me dirijo. Ahora me puedo permitir hacer un disco de country-blues como este último y después supongo que volveré al pop.

En Sabor campestre… das rienda suelta a tu gusto por los sonidos de raíz americana más que a otras influencias de corte británico de anteriores trabajos
Bueno, América siempre está ahí, detrás de los Beatles, de los Kinks, los Rolling y de otros grandes casacas rojas. Cuando te interesas por las versiones originales acabas al otro lado del charco y, madre mía, que tesoro tienen los yanquis y que poco lo aprecian. Como tú dices, doy rienda suelta, porque muchas veces me cortaba de tirarme por esos terrenos al pensar que no tenía “autoridad” para hacerlo. Al final pensé que al fin y al cabo era mi punto de vista y lo que me apetecía hacer. Habrá a quién le guste y a quién no.

¿Que te inspira más del panorama actual nacional o internacional? ¿Tiempos pasados siempre fueron mejores? Como comentas , crees en Parsons, en Cash, en los Louvin Brothers, y yo veo también Secretos, La Guardia e incluso Más Birras (lo que me ha encantado, adoraba a ese grupo!)
El panorama internacional casi lo desconozco, no he escuchado a Wilco y otros abanderados de las raíces americanas. Un poco sí a los Felice Brothers, que me encantan. En el nacional me gustan las buenas canciones del estilo que sean, Fran Nixon, Bigott, Rusos Blancos, no soy un entendido. Y tienes razón en cuanto a los Secretos, están ahí y tienen canciones country en castellano impresionantes. La Guardia lo oí menos pero su mezcla de country y pop es muy digna. Y Mas Birras también me gustaban mucho. A veces, cuando me siento a componer digo “voy a hacer algo como Apuesta por el Rock and Roll o Cass”. Una de las canciones que se ha quedado fuera del disco sonaba incluso más a Mas, valga la redundancia

Para creadores que autoeditan sus trabajos, las nuevas tecnologías ¿os han ayudado técnicamente y en cuanto a difusión?
Es verdad que grabar es mucho más fácil, no necesitas gastarte millones para tener un estudio como antes. La facilidad de difusión también es muy positiva aunque le esté costando la vida a las multinacionales del disco. El inconveniente es que el músico tiene que hacer un poco de todo: grabación, diseño, promoción, ventas. Quizás tiene que nacer una infraestructura empresarial de apoyo a la simple creación. Espero que ganen dinero y que yo también lo haga.

Y puede ser que las discográficas estén aprovechando esta nueva situación para fijarse en creadores que ya hayan hecho un trabajo “sucio” en la red, y apostar por ellos cuando atisban que ya han hecho suficiente ruido
Es legítimo. Antes también te contrataban cuando tú ya te habías ido en el Sevibus a Madrid a dejar maquetas y a que te entrevistaran en Diario Pop, en Radio Cadena y tal. Las casas de discos viven de vender y buscan siempre valores seguros. Internet es para ellos un termómetro muy útil. También hay gente que está en el negocio de la edición de discos por pasión y busca artistas y los apoya gusten o no.

¿Sigue siendo el directo la jornada de trabajo real del músico? No es fácil para un músico independiente tocar fuera de su ciudad
Quizás la definición sería que el músico tiene una jornada de trabajo de muchas horas pero sólo cobra si toca en directo, y eso también está cada vez más difícil. Es factible tocar fuera pero está complicado vivir de la música. Los de mi edad tenemos ya niños e hipotecas que mantener.

En alguna de tus letras (Me voy, ya no volveré hasta las tres) se atisba cierto asqueo con la situación actual, y en otras (Cariño, he vuelto otra vez, Esta vida me sienta mal) un dejarnos en manos de nuestro lado más canalla
Esta jodida crisis nos sigue crujiendo a todos. ¿Tenemos salida?
Vi el otro día en la tele a José Luis Sampedro decirlo muy clarito: nos están acojonando para tenernos controlados y que nos conformemos con cualquier cosa. Me da vergüenza el mundo que le estamos dejando a nuestros hijos pero no me veo con fuerzas para cambiarlo. “Me voy” quizás hable de eso, de querer irse y romper pero volver al final. Respecto al lado canalla, además de hijos e hipotecas, también tenemos úlceras y otros impedimentos físicos que dificultan que nos tiremos a eso, pero dan ganas.

¿Qué esperas de Maleso?
Mis dos primeros discos apenas los moví. Con este he hecho un esfuerzo para mandarlo a blogs especializados, prensa, radios, etc. y me ha sorprendido que haya gente que lo escuche sin saber nada de mí. El disco ha gustado,  me hacen reseñas favorables, la gente se lo descarga. Espero que el público conozca más mi música para cuando llegue el cuarto e irme haciendo un hueco. Para el futuro me gustaría seguir teniendo ganas de componer, grabar y tocar. Fuera de la música todo parece muy negro.

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Suena la corriente: "Cariño, he vuelto otra vez" - Maleso