Es un pájaro? Es una avión? Es una country-folk band? Es una banda de power-pop? Son The Avett Brothers. Y sí, son un pájaro, un avión, una country-folk band y una banda de power-pop. Y diría más, una enorme banda de power-pop. Tal vez con una instrumentación alejada de los cánones, pero con la esencia de la melodía dentro de cada canción. (...)
Más allá de las eternas discusiones en que solemos enfrascarnos, como si pareciera que nuestros puntos de vista son paradigmas musicales alejados de la posibilidad de cualquier negación. No me interesa en absoluto valorar el que muchos piensen que Rick Rubin les ha cambiado, buscando un acercamiento pop a la comercialidad. Porque desde sus principios, y pasando por discos tan antológicos como Emotionalism (2007) habrán bebido de las fuentes clásicas del folk de tradición vagabunda americana, del country de baile y lamento, habrán puesto en primera línea el banjo, las guitarras acústicas y la técnica del finger-picking. Lo han hecho, sin duda, pero siempre he visto en ellos ese gusto por el pop, por la melodía, por el dulce caramelo de unas notas capaces de adentrarse y ponerte los pelos de punta. Siempre han sido capaces de enlazar la médula de The Band con la lucidez melódica de The Beatles. Los hermanos Avett, Scott y Seth, siempre han sido capaces de transmitirme ese punto de esencia pop, vistieran como vistieran el ropaje.
Por ello, cuando en 2009 abandonaron su tradicional casa Ramseur Records, y entraron de lleno en el mundo de Rubin y su American Recordings, con una major detrás, para el lanzamiento de I and Love and You, no me pilló desprevenido. Un disco donde el piano adquiría el papel de elemento vertebrador, pero donde no abandonaban su pulsión tradicional y su anverso pop.
De la misma manera que no lo hacen en The Carpenter. Ese banjo que introduce plácidamente Live and die ya preconiza la explosión pop que llegará con el estribillo y la instrumentación completa de la banda. Podía haberla cantado perfectamente el más dulce Jonathan Richman, o aquellos Proclaimers a los que tanto recuerdan vocalmente en Geraldine. No reniego de la raíz americana que fluye por sus venas, faltaría más, pero saboreo esas melodías sin mácula que son capaces de componer. Como han hecho tantas y tantas veces los propios The Jayhawks. Es en esa fusión natural donde encuentro su grandeza.
The Carpenter entra como un puro brebaje vital desde la inicial The once and future carpenter, un country-rock con estribillo imbatible, hasta las fantásticas Pretty girl from Michigan (con esas guitarras eléctricas tan power-pop) y I never knew you, donde directamente dan la mando al beat de los 60. Sí, resulta un disco luminoso, y sin embargo, puntuado por intimismos de la casa como February seven, Life y las preciosas Through my prayers y ese vals de corazón bailable Down with the shine. O el órgano del gran Benmont Tench que caracolea entre los versos de A father’s first spring. Y todo ello a pesar de unas letras que rebuscan en la pérdida, del amor, de la vida, de la perspectiva. Die es palabra habitual en todo el recorrido del disco, casi haciendo competencia a old. Y lo que consiguen es dar a esa luminosidad musical el velo de nostalgia y melancolía que conforman la obra.
The Avett Brothers consiguen una vez más lo que aquí apreciamos por encima de otras cosas: emoción.
Suena la corriente: "Live and die" - The Avett Brothers
Suena la corriente: "Live and die" - The Avett Brothers
Cada vez me gusta más este disco. Su mejor trabajo? Creo que sí.
ResponderEliminarEs que a cada escucha gana enteros!
EliminarCreo que Avett Brothers están tocados por esa genialidad a la hora de hacer melodías y conseguir emocionar. Además en este disco mezclan muy bien su herencia clásica con sonidos más pop.
ResponderEliminarsaludos
Es que su tendencia a la melodía pop es impecable. Lo bordan!
EliminarSaludos...
Todavía no lo he escuchado, no doy a basto, pero tengo ganas, sus dos anteriores discos me gustan mucho y en el azkena me encantaron (a pesar del calor), en breve os cuento.
ResponderEliminarAbrazos Red River...
Pues dudo mucho que no te atrape, Addison. Canela fina!
EliminarNo seré yo quien te lo niegue. NI mucho menos.
ResponderEliminarExcelente crítica. Comparto tu opinión. Para mi, los Avett Bros. han sido un descubrimiento reciente y la verdad es que sus melodías suaves, dulces, su sonido acústico, rural...lo han convertido en uno de mis grupos de referencia.
ResponderEliminarCada día descubrimos algo nuevo y, a la vez, interesante.
Por si te apetece leer mi crítica te dejo el enlace al blog que he creado recientemente con un amigo http://booksymusic.blogspot.com.es/2013/03/the-carpenter-avett-brothers.html
Salu2!!!