Es el poder hipnótico de las canciones, esa capacidad para volver una y otra vez, porque en alguna ocasión hicieron una hendidura en dios sabe la parte, en el alma, en el cuerpo, en la cabeza, en el corazón. Y más de una vez nos sorprendemos porque ni siquiera es la mejor de un disco, ya no digamos de la carrera de un artista. Y si este artista es alguien capacitado para crear melodías que caminan por el filo de lo eterno, la canción en cuestión sólo será un punto. Pero es tu punto. (...)
Y como ya me ocurrió en el verano de 2010, Something for you ha vuelto con fuerza, porque supongo que en el fondo nunca se fue. Ancló sus acordes en el momento y lugar oportunos, y uno se sorprende de poder escucharla una y otra vez sin atisbo de cansancio. Y como digo, es posible que ni siquiera sea la mejor canción del disco Goodbye, killer que ese año nos habían entregado Pernice Brothers. No, definitivamente Bechamel tiene más urgencia pop, con un entrañable sabor al mejor cancionero de cualquier década, o Jacqueline Susann parece compuesta por los mejores Smithereens (y eso es mucho), o ese country que preña la que da título al disco, pero Something for you tiene ese regusto a Big Star, a Teenage Fanclub, a esas guitarras arrastradas de Neil Young, y un ambiente que sabe beber directamente de los jugos preparados en los 60, agitados en los 70, regurgitados en los 80 y especiados en los 90. Cualquiera de esas épocas podía haberla visto nacer, y cuando fuera que hubiera llegado a mis oídos, hubiera caído rendido.


Y de ahí en adelante, pocos nubarrones podemos encontrarnos en la carrera de Pernice Brothers. El espléndido Yours, mine & ours (2003) vuelve a estar trufado de joyas pop, y asevera la capacidad innata para abrir los discos con canciones de las que hacen época (The weakest shade of blue), el directo Nobody’s watching / Nobody’s listening (2004) sirve de asentamiento de cambios en la formación y precede a Discover a lovelier you (2005) y Live a little (2006). Y si alguien insinúa que no hay evolución, que algunas canciones son intercambiables entre unos y otros discos, lo mejor es volver a escucharlas y sentir cómo son capaces de apelar a nuestros sentimientos, esos que vagan entre la melancolía y la energía desbordada.
Y sí, Goodbye, killer es hasta el momento, su último trabajo. Un disco de no más de 30 minutos, porque la belleza, si comprimida, es más impactante.
Pero Joe Pernice no puede estarse quieto (saca discos en solitario, escribe novelas…). Sin dejar a su banda, anda ahora enfrascado en un nuevo proyecto, The New Mendicants, junto a otro de sus pares en esto de la búsqueda de la melodía perfecta, Norman Blake (Teenage Fanclub, BMX Bandits), y tienen ya preparado su primer EP, del que puedes escuchar un adelanto, This Time, vía Soundcloud.
No hay comentarios:
Publicar un comentario