6º Andoaingo Rock Jaialdia El criterio continúa...

Hace casi exactamente un año, escribíamos en Río Rojo una de esas sentencias lapidarias que tanto nos gustan: el Andoaingo Rock Jaialdia lleva camino de convertirse en cita irrenunciable para los amantes de los sonidos más sucios. Cámbiese la palabra sucios por excitantes, o plantéese la imagen de un festival rock hecho desde el corazón de una música en la que prima el sentimiento.

Una vez más, doce meses después, se repite la propuesta, y de nuevo, nuestra imposibilidad de asistencia. Van ya varias de varias, pero la entrada para ver a Lucinda Williams en Bilbao descansa sobre la mesa desde hace ya mucho tiempo, desde antes de que supiéramos el cartel de Andoain. En cualquier caso, nuestro alma golfa estará con unos nombres que engrandecen el trabajo de quienes se lanzan a programar rock’n’roll en tiempos de tormenta (los incombustibles Bloody Mary y I Wanna Management). (...)

The Undertones: cuando uno tiene 16 años y se hace con un disco como el debut de los norirlandeses, puede llegar a pensar que el mundo no es un lugar tan jodido como parece. Alejándose del atosigante clima político que rodeaba su país, entregan una colección mayúscula de canciones urgentes, llenas de rabia adolescente, una compilación perfecta de lo que deben ser dos o tres minutos de puro punk-pop. Canciones como Girls don’t like it, Teenage Kicks, Get over you, Here comes the summer o Jimmy Jimmy son por sí mismas ejemplo imperecedero de unos años en los que para ellos, y para el oyente, todo estaba por hacer. Los O’Neill, John y Damian (que posteriormente crearían That Petrol Emotion) y la indiscutiblemente reconocible voz de Feargal Sharkey formarían la identidad de un grupo que apenas duró cinco años. Pero con el inicio de la década de los 2000, se anunció la vuelta de The Undertones con la nueva voz de Paul McLoone, una vez que el intrincado Sharkey declinó la oferta, y a pesar de lo improbable que pudiera parecer el cambio, el resultado no decepcionó, dando incluso vida aceptable a las viejas canciones de gloria. Y uno, a pesar de su edad actual, sigue sintiendo la misma rabia que entonces.

Eilen Jewell: aún siguen sonando frescas todas y cada una de las notas de su disco de hace dos años, Queen of the minor key (sólo por dejarlo ahí y no remontarnos a sus anteriores trabajos, como el imborrable Sea of tears). Pero es que más allá de comparaciones con otras féminas con cercanía estilística y generacional, Jewell consigue llegar a la esencia del rock americano a base de picar en sus mismas bases: folk, blues, country y todo ello con la pátina que en los 50 alumbró el rock & roll. Que aún tenga 24 años nos obliga a dejar un buen hueco en la J de la estantería.

The See See: los londinenses (al menos de residencia) son uno de esos platos que degustamos en el Río con glotonería. Sus dos discos Late morning light y Fountayne Mountain contienen las dosis de psicodelia pop, de guitarras cristalinas, del amor que Love nos enseñó, del placer que The Byrds nos regaló, como para que remansen el Río, pero si además son capaces de entregarnos canciones como Mary Soul o Fix me up, su afluente se unirá por siempre a la corriente principal. Ensoñadores que son y somos.

DM3: Dom Mariani es perro viejo, perro sabio, perro guardián de las esencias que llevan al rock a guarecerse en un garaje para envolverse con las volutas del pop más poderoso. Y Australia, uno de los lugares del mundo donde mejor supieron dejarse llevar por esa oscuridad luminosa. The Stems fueron la otra cara necesaria para conformar junto a sus maestros The Saints el espejo escondido del buen gusto durante parte de los 80. Y DM3 es uno de los muchos peldaños de un músico de esos que aquí consideramos necesarios.

Y como inicio de tan sabrosa propuesta, The Buttshakers, banda de Lyon hacedores de crudo soul y los vascos Mushroom Caffeine y su paseo entre la psicodelia, el garage y el rock’n’roll de alto voltaje que han confirmado con el excelente EP Diggins Dogs.

Y nosotros esperando al año que viene, hay que joderse.

Suena la corriente: "Teenage kicks" - The Undertones