Los hay cortos y largos, nuevos y viejos, de ahora y de ayer, serios y en broma… Y aunque pudiéramos referirnos a cualquier parafernalia que rodea a un grupo, ya sea instrumental o estética, nos referimos a los proyectos en sí. Los propios grupos que se montan y se destruyen, se crean y sobreviven casi al simple calor del deseo de sus componentes. (...)
Como Papaya. Vienen de Cantabria, aunque eso sea un simplificación excesiva. “Vivimos separados, en diferentes ciudades, Madrid, Jaén, San Vicente de la Barquera, y quedamos para dar conciertos, así que había que elegir un lugar de origen”. Y se hizo el de residencia de Yanara, la más joven y la cabeza pensante, guitarrista, cantante y compositora: “hablo de historias de personajes que he ido conociendo a lo largo de mi vida, que me llamaran la atención por la forma que tenían de vivir la suya. Lo intento plantear de forma bonita, a veces la música es más alegre y las letras más tristes”. Y aunque en Minutos puedan acercarse al indie actual de corte planeador, su reminiscencia a tanto juego lúdico de los 80, con guitarras y cajas de ritmos, con voces sincopadas y saltarinas, con pop de esencia amateur y bailable nos puede recordar a los Zombies de Bonezzi o incluso a La Mode. “He escuchado mucha música a través de mis padres, que tienen gustos muy amplios entre los que se incluyen lo ochentero. Nos gustan mucho Golpes Bajos”. Pero entienden Papaya como un cocktail donde puede caber folk, pop, rock, “sobre todo comparado con nuestros otros proyectos. Violeta Vil, Jonston, Le Parody, todos estamos encaminados, con nuestros discos y giras, y de alguna manera Papaya nos sirve para empezar desde cero otra vez". Así que esperan la inminente salida de su primer single con Gramaciones Grabofónicas para dar su salto a las redes y tener mayor corporeidad que hasta ahora. “Realmente nuestro debut en directo es en este Villa de Bilbao”, aunque han aprovechado la senda abierta para pisar otros escenarios este mismo fin de semana.
Vídeo de la actuación de Papaya
Quien lleva pisando escenarios desde hace meses pero se encuentra como un debutante es Jon Urrutia, alias Pierrot. “Pierrot es un proyecto del que soy la cabeza visible, quien compone. Llevo desde octubre de 2013, y tras cuarenta y pico conciertos, hoy es la primera vez que actúo con banda”. Pero al menos, en el disco Traces of life, se aleja de la imagen del cantautor con acústica: “entre grabarlo con banda, que era difícil, o hacerlo solo con voz y guitarra, opté por arreglos de cuerda, mandolinas, coros, teclados, así quedan los temas algo más vestidos”. Y a pesar de todo, son canciones que piden banda, como en ese Slave of your inside walls, que en directo, a pesar de que uno tiene la impresión de que aún falta rodaje a esta nueva encarnación, tiene el sabor del rock americano. “Sí, pueden pedir banda, una vez me dijeron que yo hacía rock contenido, aunque también disfruto del solo yo. Siempre me han gustado los autores que dicen algo, por eso en el disco, aún cantado en inglés, vienen las traducciones, por si alguien se interesa por ellas. Uno siempre ha leído, Leonard Cohen, Lanegan, Nick Cave, Dylan, Young…”. Y aunque sus letras puedan resultar oscuras, de culpa y redención (Alvaro Fierro dixit), “el ser humano tiene que purgar por algún lado, y mi forma es esta”. Defiende la figura del cantautor a pesar de su cierta connotación negativa (“todos los nombrados también son cantaurores”), y reconoce que su participación como banda en el Villa le hace competir contra sí mismo, “soy un poco autista, y este formato exige más de mí”, y espera pueda ayudar a un presente y futuro en el que, cómo Jon reconoce, somos “militantes de la autogestión”.Vídeo de la actuación de Pierrot
Y autogestionados o no, el caso es que Antilux se han venido desde Bruselas para participar en el Villa de Bilbao. “Para nosotros es una buena manera de ser conocidos en otros países, de conseguir una visibilidad fuera de Bélgica”. Conocido el concurso por un amigo que había estado relacionado con la sección electrónica del mismo, la gran pregunta es qué les lleva a participar en la sección Pop-Rock, cuando lo suyo pareciera encajar claramente en la electrónica más pura: “Actualmente, en nuestro nuevo set, estamos haciendo canciones, con un sentimiento electrónico, pero son más pop, no realmente rock, está claro, pero tenemos guitarra e influencias del blues y del rock, somos un punto de encuentro de muchas influencias”, terrenos experimentales que les hacen mucho más atractivos cuando es esa guitarra distorsionada la que se pasea por los entresijos que ya un día atisbaron gente como Suicide o la Velvet más experimental, que cuando se centran en la electrónica de club. Y acaso en lo que pareciera un guiño a unos Residents que dicen conocer pero no en profundidad, aparecen en escena con máscaras: “tenemos un amigo que organiza performances y a veces ponemos la música para ellas, y actuar con máscaras permite crear comunidad centrada en la representación”. Además de Bégica y Francia, Bilbao es su última aventura exterior y siempre nos quedará la duda de si en el apartado Nuevas Tendencias hubieran cosechado una trayectoria más excitante que la que podemos augurar en la sección pop-rock.Vídeo de la actuación de Antilux
No hay comentarios:
Publicar un comentario